Luyện nghe bài hát La Tieta

La el viento de un golpe en los postigos.
Su cama es tan larga y tan ancha.Y las sábanas están
Con los ojos medio buscará otra mano,
Sin encontrar ninguna, como ayer, mañana.

Su soledad es el fiel,
Que conoce su cuerpo pliegue a pliegue, palmo a
Escuchará el de un gato viejo y castrado,
Que en sus duerme las largas noches de invierno.

Hay un dormido encima de la mesilla de noche,
Y un de agua medio vacío cuando se levanta (la tieta)

Un espejo le dirá
Te mayor.
Cómo ha el tiempo! Cómo han volado los años!
Cómo se han perdido por las calles los de juventud!
se arruga la piel, cómo se hunden los ojos!

La portera, a su paso, una sonrisa:
Es el orgullo de quien tiene alguien que le la cama.

día lo mismo: coger el autobús,
Para en el despacho de un abogado gandul.
Con quien en otro tiempo ella se la estrecha.
De eso hace tanto tiempo Ni lo recuerda «la (la tía soltera).
Con en otro tiempo ella se hacía la estrecha.
De eso tanto tiempo Ni lo recuerda «la tieta»

La que siempre tiene un cuando llega Navidad.
La que no nadie si un buen día cae enferma.
La que no más hijos que los hijos de sus hermanos.
La que va bien». La que dice:«¡Qué más da!»

Y el Domingo de Ramos le a su ahijado,
Un largo y blanco y un par de calcetines;
Y en la iglesia los dos lo que hace el cura
Y alabarán a Jesús que entra en

Le dará duritos para abrir una libreta:
Hay que el dinero, como siempre hizo «la tieta». (la tía soltera)
Le veinte duritos para abrir una libreta:
Hay que ahorrar el dinero, como siempre hizo tieta».

Y un día se ha de morir, más o como todos.
Se la llevará una al agujero profundo.

Entonces ya habrá el nicho y el ataúd,
Los de los sacerdotes, las misas de difuntos
Y las flores que acompañarán su
Son que a menudo las olvida la gente.

Y son tan bonitas las con crespones negros colgando,
Y detrás amigos, descubiertos hace un instante;
Y una que dice, Ha muerto la señorita
Descanse en paz. AMÉN» Y a «la tieta» (la tía soltera).